CAPÍTULO 4
Sobrellevar la Soledad
EL PROBLEMA
Como hemos visto en
el capítulo anterior, si realmente queremos tomar partido por el Señor,
entonces eso tiene un costo. Podemos
1.
Perder amigos
2.
Andar solos (la mayoría de la gente sigue a la multitud,
pero el cristiano ha decidido agradar y obedecer a Dios y ser diferente).
3.
Ser ridiculizado y escarnecido
4.
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5.
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Tomar partido por
el Señor puede resultar en tiempos de soledad. Por lo cual debemos tratar el
tema de SOBRELLEVAR LA SOLEDAD.
Una persona
puedes estar rodeada de miles de personas (en un estadio atlético, en un centro
comercial, en el colegio, etc.) y, sin embargo, ser una persona solitaria. Por
otro lado, una persona puede estar en medio del desierto a miles de kilómetros
de distancia de la persona más cercana, y no estar solo. Es posible que una
persona esté sola, pero que no sea solitaria.
Considera Mateo
14:23.
¿Estaba solo el
Señor Jesús? _____________
¿Estaba solitario?
________
¿Por qué no?
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¿Qué es la SOLEDAD?
Encontrarás abajo varias frases que describen la soledad. Al leerlas, piensa si
alguna de ellas se aplica a tu situación.
·
Soledad es cuando tus mejores amigos están a millas de distancia
y no tienes con quién compartir tus penas o alegrías.
·
Soledad es faltar algunos días en el colegio o en el trabajo y
nadie lo nota.
·
Soledad es el temor de ir a la cafetería y pensar que no habrá
nadie con quien sentarte mientras comes.
·
Soledad es ese sentimiento de profundo vacío que dice, “Mis
opiniones no le importan a nadie.”
·
Soledad es esa molesta sensación de que nadie quiere hablar
contigo.
·
Soledad es preguntarse cuál de tus “amigos” es realmente un
amigo y cuál está solamente tratando de usarte.
·
Soledad es ese sentimiento penoso de que casi nadie se interesa
realmente por ti.
·
Soledad es cuando nadie te toma en cuenta o te pone atención y
todos actúan como si tú no estuvieras.
·
Soledad es tener el sentimiento de que parece que todos te
ignoran y te evitan.
·
Soledad es verte a ti mismo como el Sr. /Srta. Impopular.
·
Soledad es preguntarte porqué tan pocos se preocupan de lo que
realmente necesitas y de las cosas que más te preocupan.
·
Soledad es cuando los demás no te dan lo que tú piensas que
mereces, como alabanzas, reconocimiento y gratitud.
LA SOLUCIÓN
Aquí hay dos pasos
esenciales que debes seguir si quieres superar con éxito la soledad:
1) Olvídate De Ti y Acércate a Dios
El Dios vivo quiere
ser tu mejor Amigo. ÉL es el mejor Amigo que una persona puede tener, el más
cercano y el más querido.
¿Es ÉL la Persona que debe estar más cerca de nosotros que nuestros padres?
Ver Salmo 27:10.
¿Es ÉL la Persona que debemos amar que a cualquier otra? Ver Mateo 10:37.
¿Es ÉL un Amigo que es fiel hasta el final, aún cuando nos fallan todos los
demás? Ver 2 Timoteo 4:6,7,10,11,14,16,17.
¿Es ÉL un Amigo fiel que nunca nos abandonará? Ver Hebreos 13:5-6.
En todo
hombre hay un vacío y una soledad que solo Dios puede llenar. ¿Puedes pensar en
otros motivos por los cuales el Señor está perfectamente calificado para ser el
mejor de los Amigos?
2) Olvídate De Ti Mismo y Preocúpate Por los Demás
La soledad
solo es un problema superficial. El verdadero problema es nada más que el
egocentrismo. Este es el feo pecado que realmente causa y produce ese terrible
sentimiento de soledad. La persona solitaria es la persona que solo se ve a sí
misma y sus propias necesidades y deseos. La persona solitaria tiene el
complejo de “yo, mi y conmigo.” En vez de desarrollar una preocupación por los
demás, todo gira en torno a sí misma.
La persona
solitaria dice: “Nadie me quiere.”
En vez de decir,
“Hay muchos que necesitan de mi cariño. ¿A quién puedo amar hoy?”
La persona
solitaria dice: “No tengo amigos.”
En vez de decir,
“¿Con quién puedo ser amistoso hoy?”
La persona
solitaria dice: “Nadie se preocupa por mí.”
En vez de decir,
“Realmente me preocupo por esa persona y le mostraré a él/ella que me importa.”
La persona
solitaria dice: “Nunca recibo la dosis de reconocimiento, alabanza y atención
que necesito.”
En vez de decir,
“Veré cómo puedo animar y ayudar a otros.”
Corrige los
siguientes versículos:
1.
Hebreos 10:24: “Considerémonos a nosotros mismos.”
2.
Filipenses 2:4: “Mire cada uno por lo suyo propio.”
3.
Romanos 15:2: “Cada uno se agrade a sí mismo.”
4.
1 Corintios 13:5: “El amor busca lo propio.
”
5.
Hechos 20:35: “Más bienaventurado es recibir que dar.”
6.
Mateo 22:39: “Amate a ti mismo y olvídate de tu prójimo.”
7.
Gálatas 6:2: “Lleva tus propias cargas y olvida las
pesadas cargas que llevan los demás.”
Ejercicio final: repasa las
reflexiones sobre la soledad que hemos escrito más arriba en este capítulo y
muestra cómo puedes vencer cada uno, olvidándote de ti mismo y alcanzando a
otros. Te ayudamos con los tres primeros:
·
Quizá pueda buscar a alguien que necesite tener a alguien
como yo para compartir su pena o alegría.
·
Me he dado cuenta de que alguien ha faltado a clases o al
trabajo. ¿Le he dicho a esa persona que la he echado de menos?
·
¿Me he fijado en una persona que está sentada sola en una
mesa y que necesita que alguien como yo se siente junto a él/ella?