CAPÍTULO
13
Encarando los Problemas
El Papel y la Mancha
La Pared y el Agujero de Ratón
Dios nos
ha dado instrucciones específicas sobre como tratar con las dificultades de la
vida. Todos los creyentes están rodeados por personas, lugares, eventos, situaciones
y problemas. Al vivir y movernos en medio de personas y problemas, Dios nos ha
dicho qué debemos hacer. En 1 Timoteo 2:1 leemos que se hagan R_______________,
O_______________, P_______________
y acciones
de gracias por todos los hombres.
En vez de acudir
a Dios con nuestro problema, dejamos muchas veces que el problema nos agarre y
nos atrape. Tal como en un tornado, permitimos que el problema nos absorba y
nos sentimos abrumados por él. Llegamos a estar demasiado y excesivamente
preocupados por alguien (padre, amigo, novia, profesor), por un lugar (hogar,
trabajo, colegio) o por algo (examen, enfermedad, un problema en el hogar, la
pérdida de un amigo, etc.). Todos nuestros esfuerzos y energías están
concentrados y enfocados en ese problema y descuidamos la situación total.
Toma una
hoja de papel blanco y pone en ella una pequeña mancha de tinta:
Es muy
fácil ver la mancha sobre el papel blanco. Se destaca. Si lo levantaras en alto
y le preguntaras a alguien, “¿Qué ves?”, probablemente te diría, “Veo una mancha
de tinta”. Pero el punto es sólo una pequeña parte del esa hoja de papel. Hay
mucho más que solo esa mancha. El problema es que tendemos a ver sólo el punto
y nada más, y el pequeño punto se nos vuelve cada vez más grande.
¿Cuantos
alumnos hay en tu clase de inglés? ¿En todo tu colegio? ¿Cómo se compara esto
(en términos de porcentaje) con toda la población del mundo (Cuántos millones?
_______)? ¿No es este número una pequeña partícula comparada con el todo?
¿Hay un
problema en tu casa con tu familia? ¿Cuántos hogares y familias hay en el
mundo? ¿Te dijeron una palabra poco amable hoy día? ¿Cómo se compara eso con
todas las palabras que se dicen alrededor del mundo? ¿Te dieron una mirada de
pocos amigos? ¿Qué es eso comparado con las muchas miradas desagradables en el
mundo? Cuando empezamos a ver todo el cuadro, nuestro pequeño problema no es
más que una pequeña mancha.
El
problema es que con mucha facilidad quedo absorto en YO, MÍ y MI MISMO, que se
me olvida que hay algo más que YO, MI y MI MISMO. Siempre es “mi escuela, mi
clase, mi tarea, mi profesor, mis padres, mi abuela, mi jabón, mi cama, mi
llamada telefónica, mi viaje en automóvil, mi_____________ y
mi_______________”. El mundo es más que solamente YO. Es GRANDE e INMENSO y tú
no eres más que una pequeña, diminuta, microscópica partícula. En vez de mirar
una sola pieza del puzzle, tenemos que aprender a ver el CUADRO ENTERO, que se
compone de miles de piezas.
Por
ejemplo, puedes recibir una llamada telefónica que a ti te parece ser el
suceso más importante del mundo. Esta llamada telefónica ocupa por completo tu mente
de modo que no hay lugar para otra cosa. No puedes pensar en otra cosa y
pierdes la perspectiva. Todo el mundo llega a ser UNA GRAN LLAMADA TELEFÓNICA.
Si alguien preguntara, “¿Qué ha sucedido hoy en el mundo?” responderías
inmediatamente “RECIBÍ UNA LLAMADA TELEFÓNICA”. Un suceso intrascendente
(comparado con el todo) ha llegado a ser un evento importante y esa
llamada telefónica es lo único que ves. Todo el tiempo estamos haciendo esto
con diferentes cosas.
Otra
manera de ver esto es pensando en un pequeño agujero de ratón en la pared:
Una
persona llega a estar demasiado preocupada y molesta por ese agujero y pronto
esa es la única parte de la pared que ve. Mientras más mira y observa (continua
mirando) tanto más grande se vuelve el agujero, y el pequeño ratón se vuelve
más y más GRANDE. Pierde su perspectiva y mientras más se acerca al ratón,
tanto más grande se vuelve el ratón (UN ROEDOR GIGANTE). Además, mientras más
acerca su ojo al agujero, pronto no ve más que el agujero y un ratón “gigante”.
Ha perdido de vista el todo y el problema (la llamada telefónica o lo que sea)
ha adquirido dimensiones gigantescas.
¿Qué debo
hacer ahora que estoy enfrentado a un gigantesco ratón? ¿Debo tratar de luchar
con él? ¿Debo caer ante él con temor? ¿Debe retroceder ante el ratón y fugarme
(huir de mi problema)? Cuando retrocedo y me aparto, entonces…
Dios
quiere que enfrentemos la realidad y que resolvamos los problemas. El punto en
el papel y el agujero de ratón en la pared (y el ratón en la pared), son muy
reales y deben ser enfrentados. Pero es peligroso cuando nos acercamos
demasiado al problema y perdemos la perspectiva y fallamos en ver todo el
cuadro. Mi vida toda no es una llamada telefónica, o un
profesor, un examen, un billete de veinte dólares, un fin de semana, etc. Mi
situación, problema, evento o crisis es solo una pequeña parte de mi vida.
Muchas
veces un evento pasa en el tiempo pero no en la
mente. No podemos o no queremos dejar de pensar en eso y así no estamos
preparados para el próximo suceso. Un niño enterró su gato muerto y luego iba
cada día a desenterrarlo para ver cómo seguía. Muchas veces hacemos otro tanto
con los eventos y problemas de ayer.
La Biblia
nos da varios ejemplos de gente que equivocadamente se concentró en una sola
cosa:
1) Ver 1 Reyes 21:1-13. ¿En cuál pedazo de
tierra estaba concentrado el rey Acab?
__________________________________
Como rey, él tenía muchas posesiones y privilegios. ¿Estaba bien que él
codiciara este pedazo de tierra? _____ El perdió de vista todas sus demás
posesiones y estuvo muy D_______________ (v.5) por causa de esta propiedad, que
era lo único en lo que pensaba. ¿Su malvada esposa llegó con un plan? _____
¿Qué mala acción fue hecha para resolver este problema (v.10, 13)?
____________________________________________
2) Ver 2 Samuel 12:1-6. Considera al hombre
rico de la historia de Natán. ¿Poseía este hombre gran cantidad de ovejas y
corderos? _____ Cuando se presentó la necesidad de proveer carne para su huésped, ¿en cuál cordero puso su
mirada? _____________________________ ¿De qué manera egoísta proveyó para su
invitado? ________________________________________
3) Ver Génesis 3:1-6. Cuando Eva fue tentada
en el jardín, ¿en qué se concentró?
__________________________________________
¿Quería la serpiente que ella se concentrara en esa sola cosa? ______ A la luz
de Génesis 2:16, ¿Eva perdió de vista todos los demás árboles del jardín? _____
Supongamos que a un joven se le dijera que puede practicar toda clase de
deportes, menos remar. ¿Sería sabio que este joven pensara en el deporte que no
puede practicar, en vez de apreciar los muchos deportes que sí puede practicar?
______ ¿Conoces a personas que se molestan por las cosas que están prohibidas,
en vez de disfrutar de las muchas cosas que pueden hacer libremente?
4) Ver Jueces 16:4-21. ¿Estaba Sansón muy
concentrado en una mujer? _____ ¿Le fue esto un problema? _____ ¿Puede la gente
hoy concentrarse demasiado en otra persona y meterse así en problemas?
5) Ver Génesis 25:27-34. Después que Esaú
regresara del campo, ¿cuál era su enfoque principal?
___________________________________________ ¿Qué deseaba más que cualquier otra
cosa? __________________________________________ ¿Puede algo parecernos muy
importante en un momento y luego nos damos cuenta de que no era tan importante?
¿Cuál debe
ser
Ver Salmo
27:4
_____________________________________________________________________
Ver
Filipenses 3:13
_____________________________________________________________________
La Solución:
1.
No debo perder de vista el principal propósito y
programa de Dios. (SU obra y SU obrar total). No
pierdas tu visión total. No permitas que el punto lo sea todo. En lo posible,
trata de ver toda la pared, no solamente el agujero de ratón y el ratón. Trata
de ver todo el cuadro, no solamente una pieza del puzzle, porque una pieza sola
no hace ningún sentido. Mira el evento como solamente un evento entre millones
de eventos. Mira a la persona como solamente una persona entre millones de
personas. Mira el lugar como solamente uno entre millones de lugares. Contempla
el cielo y contempla los campos y te darás cuenta que lo que Dios está haciendo
es mucho más vasto que TÚ. Se trata de todo el mundo, de todo el universo y de
toda la eternidad. Permanece en sintonía y en armonía con Dios y con lo que ÉL
está haciendo.
2.
No debo perder de vista que Dios está tratando con mi
propio corazón. El Dios que se preocupa de todo el mundo y
de todo el universo y de toda la eternidad, también se preocupa de mi de una
manera muy personal (ver Mateo 10:29-31). El Dios que tiene todas las piezas
del puzzle, también tiene mi pieza. Dios tiene un motivo para la mancha, para
la persona, para el problema y para el evento.
3.
No debo peder de vista que Dios trata con otras
personas por medio de mí. Mi pequeña pieza de puzzle toca
a varias otras piezas. Cuando por aquí y por allá interactúo con otras
personas, Dios quiere tratar con otros por medio de mí.
Considera
Mateo 8:23-27. Qué desea más el hombre, ¿calmar el mar o calmar el corazón?
_______________________________ Muchas veces queremos que Dios solucione los
problemas exteriores, pero no los problemas en el interior. Quiero que Dios
cambie a mi profesor o a mi amigo, pero no a mí. Quiero que Dios arregle el
trabajo y el problema, pero no mi propio corazón. Quiero que Dios cuide todo en
lo exterior para que yo (con aguas agitadas en el interior) pueda vivir en un
mar en calma pero con un corazón turbado. Nótese Mateo 8:24. ¿Había un mar en
calma? _____ ¿Había un corazón angustiado? ______
Considera
también Lucas 10:38-42. Marta tenía un punto y un agujero de ratón. Todo lo que
podía ver era esa mancha. ¡La cena era tan importante! Si esta
cena no resultaba bien, todo estaría perdido. Jesús le dijo (en esencia), “No
Marta, hay algo mucho más importante que la comida. Esta comida no
es tan importante. ¡YO SOY IMPORTANTE! Sé como María, que ha quitado sus ojos
del punto y tiene sus oídos abiertos para MÍ”.
¡MI
GRAN DIOS ES
MUY CAPAZ
DE
CUIDAR DE
ESE PEQUEÑO RATÓN!
¿Es Dios
más grande que cualquier problema que puedas tener?
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